LILIA PÉREZ, UNA LUCHADORA DE SIEMPRE.

PERSONAJE SOCIALISTA DEL MOMENTO.

Nacida en Guayaquíl  (Ecuador) un día cualquiera de Agosto de 1954, esta mujer no pudo predecir nunca que alguna vez se casaría con Orly Francisco Lascano con quién procrearía dos hijos y que como consecuencia de las actividades políticas emprendidas por el movimiento popular ecuatoriano contra el gobierno títere de Velázco Ibarra, un oscuro personaje de la vida política de aquél país empobrecido por las oligarquías que respaldaban las viejas políticas de los imperialistas que tenían convertida a la América Latina en una gran hacienda platanera al mas clásico estilo algodonero norteamericano.

LILIA PÉREZ, es sobreviviente además a la gran crisis humana que se genera como producto de la pobreza que ensancha a las grandes mayorías para convertirlas en esclavas de la mano de obra barata como figura fundamental de la penetración del capitalismo en un nuevo concepto de sociedad productiva.

Se convierte en una activista política de orientación izquierdista y esto le trae como consecuencia, persecuciones e inestabilidad familiar que se convierte con el tiempo en una huida de largo alcance que la trae a Venezuela desde la vecina población de Maicao en 1975 a Maracaibo, donde llega sin nada, apenas con algunas pertenencias que significaron el largo camino que tendría que recorrer para hacerse una mujer importante en las luchas por reivindicar su condición de revolucionaria. 

Después de pasar por todas las etapas difíciles de cualquier emigrante, Lilia se sobrepone  y comienza a dar pasos alrededor de una vida enriquecida por un cumulo de experiencias que la hacen madurar como persona, como madre y especialmente como luchadora social que no puede evitar confundirse con las comunidades, siempre al frente de las luchas que se generan como consecuencia de las desigualdades y la injusticia social.

En 1998, con llegada del Comandante Chávez al poder, esta mujer se convierte en un millón de mujeres venezolanas que prestan sus manos, talentos y voluntad para dar inicio a la construcción de una Venezuela Socialista capaz de transformar la realidad de los millones de venezolanos excluidos de por vida del disfrute de la riqueza petrolera a la cual todos los hombres y mujeres de este país tenemos derecho.

En 1977 trabaja al lado del padre Francisco Whitack en el barrio el Carmen en la Vega junto a las Hermanas de La Presentación, de Colombia, quienes acompañaban al sacerdote en una peregrina labor pastoral en aquélla comunidad llena de todas clases de problemas producto de la desidia de los diferentes gobiernos puntofijistas en contra de la clase trabajadora de aquél gran sector popular del suroeste de la gran Caracas, La Caracas olvidada del gobierno.

En 1982 hace Lilia su aparición en San agustín, en la parroquia donde nace el emblemático Madera original, con toda su carga de poesía de lo popular, de esa poesía  del esfuerzo que hacen los pobres para mostrar sus valores mas allá de lo posible. Es que Hornos de Cal se convierte en su trinchera donde va a nacer la verdadera luchadora social, en el marco de una clara postura política que se define en los lineamientos del gobierno revolucionario, por medio del Proyecto Nacional Simón Bolívar como la herramienta mas importa para alcanzar la soñada meta del socialismo.

Es entonces cuando El Metro de Caracas, da inicio por un mandato del Presidente Chávez de sistema METRO CABLE, proyecto este que transformará el hábitat de un sector de la ciudad de una impresionante influencia como paisaje urbano con un poblamiento indicador de la mas variada concentración de personas con unas grandes inclinaciones artísticas y culturales que los distinguen de otros sectores capitalinos que integran las 22 parroquias caraqueñas.

De los Comités de Salud, donde tenía centrada sus lucha, Lilia pasa a formar parte de las llamadas Madres del Barrio donde impulsa un  proceso organizativo que trae como saldo social, que ese gran colectivo conformado por mujeres de todo el país se convierte en un movimiento de referencia político de mucha importancia social. Durante la gestión de la Ministra de la Mujer MARIA LEÓN y CLAUDIO FARÍAS, Presidente para ese entonces, del metro de Caracas, un centenar de estas compatriotas pasan a formar parte de la nómina del METRO DE CARACAS en condiciones de igualdad con los trabajadores y trabajadoras de una empresa que las recibe como una experiencia nueva que les permite sumarlas a un contingente responsable para apaciguar el paso de los usuarios por las estaciones y poner en orden algunas conductas violatorias de las normas.

Al frente de estas  mujeres se encuentra LILIA PÉREZ, con toda su carga de AMOR y con esas ganas inmensas de fortalecer al movimiento revolucionario de los trabajadores del Frente Socialista del Metro de Caracas, nuestro primer personaje de esta etapa del FRENTE SOCIALISTA se inicia en medio de una campaña electoral que aparece como definitiva en el largo camino hacia el socialismo que todos los trabajadores venezolanos estamos llamados a fortalecer.